La primavera ya ha llegado, esa época del año en la que las tonalidades en la naturaleza se vuelven más alegres, los rincones se llenan de vida y cómo no, también los colores para el hogar se adaptan a esta nueva estación. En Pavimarsa analizamos los tonos que funcionan en las distintas habitaciones, para que elijas los que van contigo.
Para comenzar, debes saber cuáles son los colores cálidos y los fríos, así como los distintos efectos que tienen sobre nuestro estado de ánimo. El naranja, rojo y amarillo son estimulantes, por lo que aporta alegría al hogar. En cuanto a los violetas, verdes y azules, son tonos más fríos que crean un estado de tranquilidad. Si bien es cierto que la paleta de colores básica es muy útil para usar como base en estancias simples, combinaciones con colores RGB pueden resultar realmente originales.
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Rojo
Usándolo con moderación, en un ambiente en el que predomine el blanco, conseguirás cargar de modernidad cualquier rincón de tu hogar y adaptarlo a todos los miembros de la casa.
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Azul
La calma invade cualquier espacio en el que el azul esté presente. Si bien es cierto que la estancia en la que se añada debe ser espaciosa, la armonía y tranquilidad está asegurada, por lo que se recomienda en habitaciones de niños pequeños o lugares donde se busque el relax en el hogar.
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Verde
El color de la esperanza y la abundancia, una buena opción es combinarlo con blanco o con tonos malva para dar un toque más femenino, en un vestidor, por ejemplo. Colores para el hogar como el verde olivo convertirá cualquier rincón de tu casa en actual. El verde oscuro también es buena opción para habitaciones muy iluminadas, ya que podría restar luz en zonas con poca luminosidad.
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Amarillo
Uno de los colores secundarios es el amarillo. Potencia es sinónimo de este color tan vibrante. Si quieres introducir un extra de luz y energía en tu hogar, opta por este color. Puedes combinarlo con blanco, por ejemplo, en estancias donde busques creatividad, así como en aquellas que necesiten más iluminación.
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Cian
Es un color energizante, pero también muy vibrante, por lo que si quieres usarlo, te recomendamos que lo combines con un gris claro, beige o blanco. El resultado será fresco y natural y es bien recibido en el interior del hogar.
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Magenta
Es uno de los colores más difíciles de combinar, pero no por ello imposible. Los tonos oscuros del magenta no son muy recomendados, ya que tienden a afectar negativamente al estado de ánimo. Si te decides por este tono, úsalo sólo en algunas zonas de la estancia, pero no pintes todas las paredes en magenta intenso. Sin embargo, un lila permitirá recobrar la calma al llegar a casa. Es un color que nos gusta, pero eligiendo un tono poco intenso y combinándolo con algunos detalles más fuertes en cojines o decorados, obteniendo la pincelada de energía en la estancia.
Si quieres dar un nuevo aire a tu hogar esta primavera, con estos colores puedes realizar varias combinaciones entre tonos primarios y secundarios para adaptar cada estancia al estado de ánimo que deseas conseguir. ¿Y tú, con cuáles te quedas?