Si estás pensando en renovar tu cocina, una de las mejores formas de hacerlo es instalando azulejos en las paredes o en el suelo. Los azulejos son duraderos, fáciles de limpiar y pueden añadir un toque de estilo a cualquier espacio. Sin embargo, si nunca los has instalado antesantes, puede parecer una tarea intimidante. Aquí te ofrecemos algunos consejos para que puedas instalar azulejos en la cocina con éxito.
Preparación de la superficie
Antes de instalar los azulejos en la cocina, es importante preparar la superficie correctamente. Si los estás instalando en una pared, asegúrate de que la superficie esté limpia, seca y libre de cualquier resto de papel o pintura. Si vas a instalar azulejos en el suelo, asegúrate de que la superficie esté limpia, seca y nivelada.
Corte de los azulejos
Para asegurarte de que los azulejos se ajusten perfectamente en la pared o en el suelo, tendrás que cortar algunos de ellos. Para hacerlo, necesitarás una herramienta de corte de azulejos. Si nunca has usado una antes, asegúrate de seguir las instrucciones del fabricante para evitar lesiones.
Preparación de la lechada
Antes de instalar los azulejos, tendrás que preparar la lechada. La lechada es la mezcla que se utiliza para llenar los espacios entre los azulejos. Asegúrate de seguir las instrucciones del fabricante para mezclar la lechada correctamente.
Instalación de los azulejos
Comienza instalando en la esquina inferior de la pared o en la esquina más alejada de la puerta si estás instalando las piezas en el suelo. Usa una llana dentada para aplicar una capa uniforme de lechada sobre la superficie, asegurándote de que los espacios entre los azulejos estén uniformes.
Limpieza y sellado
Una vez llevada a cabo la instalación, deja que la lechada se seque durante al menos 24 horas. Luego, limpia los azulejos con un paño húmedo para eliminar cualquier exceso de lechada. Finalmente, séllalos para protegerlos de la humedad y la suciedad.
Siguiendo estos consejos, podrás instalar azulejos en la cocina sin problemas. Recuerda que si no te sientes cómodo haciendo el trabajo por tu cuenta, siempre puedes contratar a un profesional para que lo haga por ti.