Ahorrar en calefacción es posible incluso sin pasar frío. Controlar la potencia, realizar un buen aislamiento o cuidar de manera adecuada los radiadores son aspectos que deben tenerse en cuenta para controlar el gasto innecesario de energía y, por consiguiente, dinero.
- Realizar revisiones de caldera:
Si la caldera es antigua, recomendamos renovarla por una más eficiente. Los nuevos modelos consumen menos energía y producen más calor, haciendo que la inversión se recupere rápidamente.
Por supuesto, la purga de los radiadores es esencial para eliminar el aire. Las bolsas que se generan impiden el paso del agua caliente, por lo que puede suceder que haya zonas más frías. Esto conlleva al aumento de gasto, ya que requiere de más combustible para poder alcanzar la temperatura marcada en el termostato.
- Programaciones:
No tiene sentido activar la calefacción si vas a estar la mayor parte del día fuera de casa. Programa un par de horas antes de llegar a casa. Este sencillo paso permite ahorrar en calefacción, ya que tu casa estará caldeada a tu llegada e igual para despertar cada mañana. Programa la temperatura para que aumente una media hora antes de que suene tu alarma y el ambiente estará ideal al salir de la cama.
- Cuidado con las malas prácticas:
Colocar ropa en los radiadores evita que el aire caliente circule de manera adecuada, lo que provocará que la caldera trabaje más para conseguir alcanzar la temperatura. Sin embargo, puedes utilizar un tendedero portátil y situarlo cerca del radiador.
Por otra parte, existe la costumbre de cerrar los radiadores en las habitaciones que no se usan habitualmente, pero lo cierto es que algunos expertos indican que es recomendable mantenerlos encendidos pero con temperatura inferior. El motivo es que las estancias frías afectan a la temperatura global.
Otro de los consejos que damos para ahorrar en calefacción es usar esterillas o alfombrillas en los bajos de las puertas, ya que esas rendijas permiten que se pierda hasta un 5% del calor. También se pueden incorporar burletes en ventanas y puertas para aislar el interior y evitar que el calor se escape.
Ya ves que conseguir ahorrar en la calefacción sin pasar frío es posible con estos tips que te damos. Si tú conoces otros trucos, coméntalos, estaremos encantados de añadirlos en la lista.